Este año participan miles de ciudades de más de 180 países y territorios. En España se han unido a la campaña 450 pueblos y ciudades, incluidas todas las capitales de provincia, 200 empresas y 250 organizaciones. Todos unidos a través de este simbólico apagón que se celebra de 20:30 a 21:30, hora local.

Hace ahora 11 años, Sidney apagó las luces de miles de hogares, edificios y monumentos emblemáticos durante una hora, como gesto simbólico para llamar la atención sobre el problema del cambio climático. Una acción sencilla que con el tiempo se convertiría en el mayor movimiento ambiental: la Hora del Planeta. Este año, en su 12ª edición, han participado miles de ciudades de más de 180 países y territorios del mundo, apagando más de 10.000 monumentos y edificios emblemáticos. La Hora del Planeta es ya no solo la mayor campaña de sensibilización, sino una oportunidad única en defensa del planeta, que promueve estilos de vida sostenible, fomenta el desarrollo renovable y desarrolla proyectos de conservación de bosques, mares y recursos naturales, luchando contra la pérdida de biodiversidad.

Precisamente el mensaje central de este año ha sido el impacto del cambio climático sobre la biodiversidad, dos caras de la misma moneda. Desde WWF pedimos una vez más el esfuerzo de todos, individuos, ayuntamientos, empresas y organizaciones, para luchar contra la pérdida de biodiversidad y apagar la luz por alguna de las múltiples causas posibles: proteger la vida salvaje, evitar el avance del desierto, impulsar las energías renovables, conservar nuestros ríos y bosques, evitar las inundaciones…

Las pirámides de Egipto, el Estadio Nacional de Pekín, la Torre Eiffel, el Partenón, el Coliseo, la Basílica de San Pedro o el Burj Khalifa de Dubai son solo algunos ejemplos de los monumentos más emblemáticos del mundo que han apagado sus luces durante la Hora del Planeta. En España, las más de 450 ciudades (todas las capitales de provincia incluidas) apagarán unos 1.000 monumentos como la Alhambra de Granada, la Torre del Oro de Sevilla, el Palacio Real de Madrid y la Puerta de Alcalá, la Sagrada Familia de Barcelona, la Muralla de Ávila, la catedral y castillo de Bellver de Mallorca o El Monasterio de El Escorial.

Durante la Hora del Planeta se celebran miles de eventos multitudinarios en la calle para poner de manifiesto el poder de los ciudadanos y pedir un modelo energético más saludable, seguro y justo. Todos los gobiernos y empresas deben adoptar medidas urgentes para conseguirlo y así evitar los peores efectos del cambio climático. En España, organizamos 13 eventos por todo el territorio y, en Madrid, la jornada ha empezado con una carrera matutina por el planeta, convocada por Runator, y durante la hora mágica se celebra una “batalla de rap” por el medio ambiente en la que participan seis conocidos artistas.

Por su parte, 250 fundaciones, ONG, asociaciones, organismos públicos y privados, colegios, partidos políticos y otras organizaciones se han unido este año a la campaña, además de 200 empresas. Correos ha distribuido carteles de campaña en más de 5.000 carritos y Ecovidrio ha organizado un concurso entre sus trabajadores con el lema “¿Tú por qué apagas?”. Además, gracias a Clear Channel, la Hora del Planeta ha llegado a los centros comerciales.

Adif, por su parte, apaga los rótulos de 35 estaciones. Y muchas otras empresas como Vodafone, Movistar, Schweppes, González Byass (Tío Pepe), grandes cadenas de alimentación como Lidl, Eroski o Caprabo o sedes de bancos y aseguradoras como BBVA, Santander, Fundación La Caixa o Mapfre, dejan a oscuras sus luminosos más representativos. Las tiendas de Decathlon y H&M participan difundiendo información de la campaña. Inditex es de nuevo partner de la Hora del Planeta, difundiendo los mensajes, apagando las luces de sus tiendas y donando las camisetas de campaña. Y gracias a los media partner, EFE Verde, Prisa y RTVE, la campaña tiene una gran difusión.

La noche mágica de la Hora del Planeta es, más que nunca, mucho más que un símbolo. Es la expresión multitudinaria de la necesidad de actuar por el medio ambiente los 365 días del año y ha adquirido una dimensión extraordinaria al unir al mundo entero en una causa común: defender nuestro hogar y la diversidad de vida que alberga.